El otro día fuimos a la boda de S. Lo pasamos muy bien y disfrutamos de encuentros con antiguos amigos. Al volver a casa S. me envió una foto de mi corbata. La había olvidado sobre la mesa.

El caso es que esta semana le pregunté por Japón y cómo lo estaban pasando. Le pedí que enviaran fotos y recibí esto:
Es una de las regalos más bonitos que me han hecho. ¿No es muy guay?